Por: Guillermo Montelón Nava
UNTC-COLIMA
En la comunidad de Callejones del municipio de Tecomán, la Unión Nacional de Trabajadores del Campo (UNTC) está haciendo equipo con el grupo de Jóvenes Promotores de los Derechos Humanos PROCEDER y Casa Mextly, A. C., en el proyecto “Sembrando Cultura”, bajo la coordinación de la compañera Laura Jiménez, quien con mucho ánimo y entrega, trabaja en esa localidad para motivar la participación, especialmente de los niños y las mujeres adultas.
El proyecto “Sembrando Cultura” obtuvo el apoyo de INDESOL y actualmente se realizan acciones para fortalecer y enriquecer el conocimiento tradicional en cultivos de traspatio, impulsar el acceso a innovaciones tecnológicas sustentables, al tiempo que se promueve el empoderamiento comunitario basado en los derechos humanos para la autogestión y desarrollo, e impulsar la agricultura doméstica y orgánica. Con este proyecto se beneficiará a un total de 50 personas, especialmente mujeres adultas y niños.
Las actividades que se llevan a cabo consisten en talleres de capacitación, dotación de algunas herramientas y equipo, integración de brigadas de trabajo y algunos insumos que ya se utilizan para alcanzar la meta de la capacitación en Tecnologías sustentables, capacitar a los beneficiarios sobre la producción de fertilizantes, fungicidas, abonos e insecticidas orgánicos, también para formar el Comité Comunitario para la promoción de los derechos humanos y seguimiento de acciones, así como para la conformación de cinco Brigadas de trabajo entre las que están la de siembra de hortalizas y huertos familiares de traspatio y la producción de abono orgánico que incluye el taller de lombricultura.
Se escogió Callejones en el municipio de Tecomán por ser una comunidad de alta marginación, conformada por familias de jornaleros asalariados que sirven a los propietarios de las grandes huertas de plátano, coco y otros frutales y que por su trabajo están expuestos a la contaminación de agroquímicos, pero que además requieren de apoyo para impulsar la autogestión de su propio desarrollo, ya que la gran mayoría de niños, jóvenes y adultos viven sin mayores expectativas de progreso y bienestar, por estar sujetos a las condiciones de una cultura laboral dependiente, lo que ha propiciado una constante migración de los hombres a Estados Unidos de Norteamérica.
El avance actual del proyecto es bueno a pesar de algunas dificultades que se han encontrado tanto por las condiciones sociales, culturales y económicas de la región, como en lo operativo, sobre todo por la distancia y la insuficiencia de recursos, pero a la fecha ya se integró el Comité de Derechos Humanos, se han integrado grupos de trabajo y las primeras brigadas están avanzando en la capacitación con los talleres.
UNTC-COLIMA
En la comunidad de Callejones del municipio de Tecomán, la Unión Nacional de Trabajadores del Campo (UNTC) está haciendo equipo con el grupo de Jóvenes Promotores de los Derechos Humanos PROCEDER y Casa Mextly, A. C., en el proyecto “Sembrando Cultura”, bajo la coordinación de la compañera Laura Jiménez, quien con mucho ánimo y entrega, trabaja en esa localidad para motivar la participación, especialmente de los niños y las mujeres adultas.
El proyecto “Sembrando Cultura” obtuvo el apoyo de INDESOL y actualmente se realizan acciones para fortalecer y enriquecer el conocimiento tradicional en cultivos de traspatio, impulsar el acceso a innovaciones tecnológicas sustentables, al tiempo que se promueve el empoderamiento comunitario basado en los derechos humanos para la autogestión y desarrollo, e impulsar la agricultura doméstica y orgánica. Con este proyecto se beneficiará a un total de 50 personas, especialmente mujeres adultas y niños.
Las actividades que se llevan a cabo consisten en talleres de capacitación, dotación de algunas herramientas y equipo, integración de brigadas de trabajo y algunos insumos que ya se utilizan para alcanzar la meta de la capacitación en Tecnologías sustentables, capacitar a los beneficiarios sobre la producción de fertilizantes, fungicidas, abonos e insecticidas orgánicos, también para formar el Comité Comunitario para la promoción de los derechos humanos y seguimiento de acciones, así como para la conformación de cinco Brigadas de trabajo entre las que están la de siembra de hortalizas y huertos familiares de traspatio y la producción de abono orgánico que incluye el taller de lombricultura.
Se escogió Callejones en el municipio de Tecomán por ser una comunidad de alta marginación, conformada por familias de jornaleros asalariados que sirven a los propietarios de las grandes huertas de plátano, coco y otros frutales y que por su trabajo están expuestos a la contaminación de agroquímicos, pero que además requieren de apoyo para impulsar la autogestión de su propio desarrollo, ya que la gran mayoría de niños, jóvenes y adultos viven sin mayores expectativas de progreso y bienestar, por estar sujetos a las condiciones de una cultura laboral dependiente, lo que ha propiciado una constante migración de los hombres a Estados Unidos de Norteamérica.
El avance actual del proyecto es bueno a pesar de algunas dificultades que se han encontrado tanto por las condiciones sociales, culturales y económicas de la región, como en lo operativo, sobre todo por la distancia y la insuficiencia de recursos, pero a la fecha ya se integró el Comité de Derechos Humanos, se han integrado grupos de trabajo y las primeras brigadas están avanzando en la capacitación con los talleres.